RESUMEN METEOROLÓGICO DEL AÑO 2020 DE LA CIUDAD DE SANTIGO DE COMPOSTELA ELABORADO CON LOS DATOS OBTIDOS DIARIAMENTE EN LA ESTACIÓN DEL OBSERVATORIO ASTRONÓMICO RAMÓN MARÍA ALLER DE LA USC

Centro colaborador de la Agencia Estatal de Meteorología

 

 

Consideraciones generales

 

1) Al igual que en 2019, el año finalizó con muchos días con precipitaciones y con una importante cantidad de lluvia recogida, lo que transmitió la sensación de que el año fue muy lluvioso cuando realmente no fue así. Pese al esfuerzo de diciembre (el mes en el que más llovió), la cantidad total de lluvia del año, 1.641,7 litros/m², no llegó a la media de las últimas décadas en Compostela, que está un poco por encima de los mil ochocientos litros/m². Aún así, entre 1.600 l/m² y 2.000 l/m², sería el intervalo de normalidad correspondiente a las últimas décadas.

 

El verano fue especialmente seco, destacando julio, mes en el que no cayó ni una gota en la ciudad de Santiago. Se trata del mes tradicionalmente con menos lluvia, pero la ausencia total de precipitación en él no se producía dende el año 1981, a pesar de los 0,9 l/m² de julio de 1993 y de los 1,2 l/m² de julio de 2016.

 

Luego de un abril lluvioso y con poca insolación, en los cinco meses siguientes sólo se recogieron 225 l/m². Sin embargo, el agua medida en los tres últimos meses del año, especialmente en diciembre (379,6 l/m²), paliaron la sequía acumulada.

 

En 2020 hubo sólo 11 días en los que la lluvia superó los 30 litros/m². Fue el 16 de enero el que se llevó la palma (87,3 l/m²), seguido del 15 de diciembre (73,2 l/m²), el 29 de enero (50,7 l/m²), y el 1 de marzo (50,1 l/m²).

 

Por otra parte, fueron 193 las jornadas en las que llovió en algún momento del día. Dicha cifra baja a 172 (47%) si no se consideran los 21 días (5,7%) con precipitación inapreciable, es decir aquellos con menos de 0,1 l/m2. Todas ellas son cifras que entran dentro de la normalidad. Volvió a no nevar en Compostela. no lo hace desde el 27 de febrero de 2018, pero no cuajó desde la noche del 12 al 13 de marzo de 2013.

 

 

2) el año 2020 fue generoso coas temperaturas en Santiago. Nada menos que en 24 días se superaron los 30º. la máxima del año (35º2) tuvo lugar el 18 de julio, siguiéndole el 6 de agosto (34º6) y el 12 de septiembre (34º2). En este último mes, es necesario destacar también los registros de los días 13 (33º6), 11 (32º1), 3 (31º6), 9 (31º1), y 10 (30º3). Tampoco es raro que en mayo, sobre todo a finales, el termómetro supere los treinta, y así sucedió también en 2020 en cuatro días, del 27 a 30.

Por el contrario, en seis jornadas la temperatura máxima quedó por debajo de los diez grados. Aquí destaca la del día 4 de diciembre, con sólo 6º3, aparte de otros cuatro días de diciembre y uno en marzo.

 

Por lo que respecta a las mínimas, hay que destacar que en todo el año no se bajó de los cero grados, siendo precisamente esa la temperatura que se midió el 11 de enero y que a la postre resultó ser la mínima absoluta de 2020. En otras cinco ocasiones, la mínima del día se situó entre 0º y 1º.

 

Las temperaturas mínimas más elevadas tuvieron lugar en agosto. En la noche del día 7 de ese mes no se bajó de los 19º6. Son también destacables las de los días 27 (18º8), 11 (18º6), y 19 (18º0). El día 14 de septiembre, la temperatura mínima fue de 18º5.

 

 

3) En cuanto al tiempo que el Sol estuvo visible en los cielos compostelanos, decir que de nuevo el número de horas de Sol, 2.208, superó la media. Dicha cifra supone un 50,3 % sobre las posibles horas de insolación. el mes más soleado fue julio con más de 350 horas, siguiéndole junio, septiembre y mayo. En el lado opuesto están diciembre, con poco más de 62 horas, y abril, que no llegó a 110.

Destaca de nuevo julio con 28 jornadas con más de 9 horas de insolación. Así mismo, de esta cota pasaron tanto mayo como agosto en 17 días cada uno de ellos. Fueron en total 108 los días del año con más de nueve horas de Sol. Por el contrario, el astro rey no tuvo a bien asomarme por Santiago en 44 días (9 en diciembre, y 8 tanto en enero como en noviembre). En todos los meses hubo algún día completamente cubierto, excepto en julio.

 

José Ángel Docobo Durántez

Observatorio Astronómico Ramón María Aller

USC