- El Centro Singular de Investigación en Química Biolóxica e Materiais Moleculares de la USC es un ejemplo de impulso a la carrera investigadora en mujeres y un imán que atrae talento foráneo
- Equilibrio entre hombres y mujeres entre las “jóvenes promesas”, con un 47% de investigadoras predoctorales
- Las tres últimas investigadoras Ramón y Cajal incorporadas al Centro son mujeres
- La directora adjunta del CiQUS, Dolores Pérez, y jóvenes científicas como María Giménez, Rebeca García Fandiño, Beatriz Pelaz y María Tomás; ejemplos de liderazgo femenino
Hoy es 11 de febrero, Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, una fecha proclamada por la ONU para lograr el acceso y la participación plena y equitativa en la ciencia, la igualdad de género y el empoderamiento femenino; en un sector (STEM) donde quizás sea más patente el desequilibrio de género. Pero el Centro Singular de Investigación en Química Biolóxica e Materiais Moleculares (CiQUS) de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) es un ejemplo de ‘cantera’ de ciencia en femenino, impulsando las carreras investigadoras de las mujeres y captando talento de fuera de Galicia.
El porcentaje femenino, en una plantilla de 160 profesionales, se concentra en los perfiles de futuros talentos: el 47% de las investigadoras predoctorales son mujeres. La representación femenina desciende en fases más avanzadas de la carrera investigadora, pero desde el Centro se esfuerzan en corregir esta tendencia y ven el futuro con optimismo. “Para nosotros es una prioridad captar talento dentro y fuera de Galicia y promover el liderazgo de nuestros jóvenes investigadores e investigadoras. Estamos muy satisfechos de que la mayoría de los talentos emergentes incorporados en los últimos años sean mujeres” afirma Dolores Pérez, directora adjunta del CiQUS.
Precisamente, la puesta en marcha de este Centro Singular de Investigación de la USC fue liderada por una mujer. Fue Pérez quien, como Directora Comisaria durante el período 2010-2014, asumió la responsabilidad de implantar un modelo de centro, pionero en el sistema universitario español, en cuya gestación también había participado activamente.
Desde la dirección del centro, que desde 2014 comparte con el Director Científico, José Luis Mascareñas, defiende la apuesta por el talento femenino. “Como dato importante, las tres investigadoras Ramón y Cajal –programa que facilita la estabilización de la carrera académica en el mundo universitario- que se han incorporado al CiQUS desde 2016 han sido mujeres”, indica.
Dolores Pérez, pionera en química organometálica de arinos
La Directora Adjunta del CiQUS Dolores Pérez es catedrática de Química Orgánica, con formación postdoctoral en la Universidad de California en Berkeley en 1992-1993 y científica visitante en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (1996), ha sido pionera en el descubrimiento de la participación de arinos, intermedios de reacción de vida corta, en procesos catalizados por metales de transición, un trabajo que ha contribuido de forma significativa al renacimiento de la química de estas especies inestables en los últimos años. Sus investigaciones actuales se centran en el descubrimiento de nuevas reacciones de interés sintético catalizadas por complejos metálicos y en la aplicación de la química de arinosa la síntesis de sistemas policíclicos conjugados no convencionales, de interés en electrónica orgánica.
Cuatro jóvenes atraídas por el CiQUS
Asimismo, dentro de los ejemplos de liderazgo destacan cuatro investigadoras jóvenes que lideran sus propios proyectos en el CiQUS, como son María Giménez, Rebeca García Fandiño, Beatriz Pelaz y María Tomás. Ellas son el ejemplo de la eficacia del Centro captando talento porque todas –excepto Rebeca García- no tenían relación personal ni profesional previa con Galicia y han apostado por el CiQUS por su relevancia y reputación.
María Giménez López, investigadora Ramón y Cajal, ERC-Starting Grant, es IP en el CiQUS y profesora asociada honoraria en la Universidad de Nottingham. Doctora por la Universidad de Valencia en 2006. Realizó sus estudios postdoctorales en la Universidad de Nottingham. En 2009 fue galardonada con una beca Marie Curie y en 2011 fue Fellow de la Royal Society. Ya en 2012, consigue el Premio al Investigador Emergente de la Real Sociedad Española de Química y en febrero de 2018 se une al CiQUS lanzando su proyecto ERC-STG NANOCOMP.
El grupo de la Dra. Giménez trabaja en el desarrollo de nuevos materiales híbridos de carbono con aplicaciones en el almacenamiento y conversión de energía, así como en el campo de las tecnologías de la información. Reconoce la apuesta por el “talento” y la “excelencia” del CiQUS, “independientemente del condicionante de ser mujer”; y se considera orgullosa de su elección, “al ser uno de los pocos centros que me brindaban la oportunidad única, no solo de liderar una de las líneas temáticas de materiales de carbono, sino también de poder colaborar con científicos punteros de diferentes áreas que me permitiesen ampliar el impacto de mis investigaciones”.
Rebeca García Fandiño, investigadora Ramón y Cajal, es doctora por la Universidad de Santiago de Compostela (2006, Premio Extraordinario) y cuenta con experiencia postdoc en el Instituto de Investigación Biomédica de Barcelona (IRBB) y en la Universidad de Oxford. Lidera un grupo de Química Computacional en el CIQUS, como investigadora principal de varios proyectos nacionales (Retos-2018 y JIN-2014, MINECO) e internacionales (IC&DT, FCT-Portugal). Su investigación se centra en el estudio de sistemas supramoleculares que actúan a nivel de la membrana celular, a través de herramientas de simulación computacional. Es también cofundadora de la spin-off universitaria MD.USE Innovative Solutions SL, especializada en la simulación y la visualización molecular a través de herramientas de última generación, como la realidad virtual y realidad aumentada.
García Fandiño ha desarrollado su carrera en diversos centros pero, al conseguir en 2018 el contrato Ramón y Cajal tuvo clara su elección. “Decidí volver al CiQUS porque es uno de los mejores que he conocido y vi una necesidad, relacionada con mi área de especialización, la Química Computacional aplicada a la supramolecular, cada vez más imprescindible como herramienta complementaria a la investigación experimental que se lleva a cabo en nuestro centro”.
Beatriz Pelaz, investigadora Ramón y Cajal, es doctora por la Universidad de Zaragoza (2012). Hasta 2016 formó parte del grupo del Prof. Parak en la Philipps-Universität Marburg, Alemania, primero como investigadora postdoctoral y a posteriori como investigador Humboldt. Desde enero de 2017, colidera el grupo BionanoTools en CiQUS, primero como investigadora principal de un proyecto para Jóvenes Investigadores (JIN), y desde 2019 como investigadora Ramón y Cajal. Su investigación se centra en el desarrollo de materiales inteligentes controlables remotamente, y el estudio de su interacción con entidades biológicas.
Según indica, su decisión de elegir el CiQUS ha estado condicionada por “la calidad de la ciencia que se realiza en el centro y la perspectiva de crecimiento”. Para la doctora Pelaz, “realizamos una importante labor de divulgación, a través de muchas actividades para hacer llegar la ciencia a toda la sociedad, y en particular, a estudiantes. Durante los últimos años, se ha hecho especial énfasis en motivar a las futuras generaciones de científicas”, incide.
María Tomás, investigadora JIN (Jóvenes Investigadores) y única en el CiQUS que lidera, actualmente, este programa competitivo de la Agencia Estatal de Investigación, es doctora con Premio Extraordinario por la Universidad de Oviedo y ha sido reconocida en 2010 con el Premio Suschem Predoc de la Real Sociedad Española de Química. Durante su doctorado ha realizado estancias en la Universidad de Bristol (Inglaterra) y Montreal (Canadá); y postdoc en Munich. En 2014 fue galardonada con la beca Alexander von Humboldt y en 2015 se une a la USC como becaria Juan de la Cierva bajo la supervisión del Profesor Mascareñas. Su investigación se centra en el desarrollo de transformaciones catalizadas por metales en hábitats biológicos, incluidas las células vivas y su implementación para la biodetección y terapia dirigida.
Tomás indica que “tenía claro que quería desarrollar mi investigación en un centro puntero a nivel internacional que tuviese además un fuerte compromiso con la carrera investigadora de las mujeres y, sin duda; el CiQUS reunía todos los requisitos. Por supuesto, he encontrado en el Centro un gran respaldo, que se ha convertido a lo largo de los años en referente para las científicas”.
Estas investigadoras son solo un ejemplo del potencial del CiQUS, que exporta e importa talento para conseguir que la Química se escriba con nombre de mujer.